Resumen:
Se nos habla acerca de la participación y las facultades del director encubierto, quien no es otro que aquella persona respecto a la cual la ley societaria ha establecido que debe tratársele como tal en los concerniente a los asuntos de la sociedad, a pesar de no ser aquél válidamente elegido para la administración de la sociedad, pues este último actúa normalmente bajo sus direcciones o instrucciones. Sobre ello, el autor profundiza en su naturaleza jurídica; el nexo causal en el marco de esta figura; las implicancias de encontrarlo; quién puede ser sujeto de responsabilidad en estos casos; la regulación que ofrece al respecto la Ley General de Sociedades; entre otros.