Resumen:
"Se dice que la Navidad es de los niños y las niñas. Entonces mi primer deseo es que la familia, la comunidad y la escuela vuelvan a cumplir plenamente su función protectora. En estos tres entornos es que nuestros hijos viven buena parte de su vida y se van formando como ciudadanos. Por eso, no es posible que en nuestro país, algo más de tres cuartas partes de ellos hayan sufrido algún tipo de violencia en su hogar y que casi dos terceras partes haya sido física. Es una vergüenza que solo una mitad considera a su hogar como un lugar seguro".