Resumen:
Las marcas se mueven en determinados territorios, que deben ser
precisados con diferentes variables: demográficas, geográficas,
psicográficas y/o conductuales. Estos territorios delimitan los
espacios de actuación de las marcas para que exista coherencia en
las características del producto (o servicio), el estilo de comunicación,
los mensajes, las motivaciones, beneficios, la imagen y personalidad
de la marca, el posicionamiento, el público objetivo, el precio, las
estrategias de innovación y los canales de venta en los que se ofrecen.